BUSCANDO EL CAMBIO



Ser diferente no es lo usual porque aprendimos a comportarnos y actuar bajo ciertos parámetros, poniéndonos mascaras que tal vez no sentimos y que no nos pertenecen.  Seguramente el temor a ser diferente puede ser más grande que el ser nosotros mismos, eso aprendimos de pequeños y nos cuesta muchas veces dejar fluir esas actitudes, sentimientos que reflejan lo que somos verdaderamente.

Tal vez si quisiéramos podríamos tener esa opción de quitarnos ese disfraz que nos obliga la sociedad, donde nos dicen cómo comportarnos, que atuendo tener, que religión seguir, seguir una guía de cómo llegar hacer profesionales y “triunfar”, desenvolvernos bajo parámetros que crearon y nosotros simplemente seguirlos;  nos hemos preguntado, si es eso lo que realmente queremos?, por qué actuamos de esa manera donde estamos perdiendo nuestra propia identidad, hemos dejado de escucharnos a nosotros mismos porque ahora escuchamos lo que nos dicen e imponen.



Muchos de nosotros ya siendo personas adultas, no estamos contentos con quien somos, partiendo de que hacemos actividades que realmente no son de nuestro gusto, pero que seguramente por seguir alguna influencia lo hemos hecho.  Como dicen popularmente “más vale tarde que nuca” y es el momento de revisar si lo que hacemos y como lo hacemos es lo que hemos siempre deseado.  A veces creemos tener conciencia y/o estar en conciencia, pero esto lo medimos bajo parámetros ya dados por la misma sociedad, es difícil pero no imposible poder comprender realmente lo que somos y poder dejar hablar a ese YO que está dentro de nuestro interior y que lo hemos tenido callado por muy buen tiempo.

Tal vez nos preguntaremos como hacerlo y si lo pensamos racionalmente no llegaremos muy pronto a la respuesta, porque siempre lo mediremos bajo los estándares ya dados por una sociedad, mas no por lo que sentimos y lo que expresa realmente nuestro YO.  Para esto debemos dejar en calma nuestra mente y dejar hablar nuestro corazón, porque solo él, nos podrá ubicar en donde estamos y para dónde queremos ir. Hoy por hoy seguimos ciegamente lo impuesto y creemos que la verdadera felicidad se rige solo en lo económico, es momento de detenernos y en la tranquilidad realmente sentir que hacemos aquí y para qué estamos aquí.



Podemos despertar de esta vida en letargo en la que estamos o simplemente seguir la que llevamos, donde nos comportamos como alguna vez nos enseñaron en nuestra infancia que se comportaban los seres vivos: nacen, crecen, se reproducen y mueren.  Está en nuestras manos hacer diferente esta vida, tal vez en algún momento de nuestra vida hemos escuchado de casos  de  personas que en términos médicos estuvieron cerca de la muerte por alguna enfermedad y lograron vencerla porque su deseo era seguir viviendo y después de ese suceso ellos hablan de un antes y después, su vida ya no es la misma porque ahora disfrutan cada momento que viven, ya no viven esa vida acartonada que nos enseñó la sociedad…………estamos invitados hacer esa “muerte” que pueda dejar atrás todo eso aprendido y poder DESPERTAR.




JUAN CARLOS VARGAS

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